Liposucción ultrasónica
Liposucción ultrasónica
La liposucción ultrasónica es un procedimiento de contorno corporal que utiliza ondas de ultrasonido para licuar las células de grasa antes de ser aspiradas del cuerpo. A diferencia de la liposucción tradicional que extrae la grasa de forma mecánica, esta técnica es asistida por tecnología que facilita una remoción más suave y selectiva.
¿Cómo funciona?
- Emisión de ultrasonido: Se realizan pequeñas incisiones por donde se introduce una sonda o cánula especial que emite vibraciones ultrasónicas.
- Licuefacción de la grasa: Estas ondas rompen las membranas de las células grasas, convirtiéndolas en una emulsión líquida.
- Aspiración: Una vez licuada, la grasa se extrae con mayor facilidad y precisión a través de una cánula de succión más delgada.
Beneficios principales:
- Mayor precisión: Permite esculpir el cuerpo con mayor exactitud, siendo ideal para áreas difíciles o fibrosas.
- Menor daño a los tejidos: Al licuar la grasa, se minimiza el trauma en los vasos sanguíneos, nervios y tejidos circundantes, lo que reduce el sangrado, los hematomas y la hinchazón.
- Recuperación más rápida: El proceso menos invasivo se traduce en un postoperatorio con menos dolor y un tiempo de recuperación más corto.
- Mejora de la piel: La energía ultrasónica puede estimular la producción de colágeno, lo que ayuda a la retracción de la piel y mejora su elasticidad y firmeza, logrando un contorno más liso y uniforme.
Es importante destacar que la liposucción ultrasónica no es un método para bajar de peso, sino una técnica para eliminar depósitos de grasa localizados en personas que se encuentran cerca de su peso ideal. Los resultados definitivos se aprecian a los pocos meses de la intervención, y se mantienen con un estilo de vida saludable.